Hace poco más de dos años corrí la media maratón en Brooklyn en 2:03:07, y el domingo pasado volví a la distancia en el Bronx para terminarla en 2:03:50. Creo que los años no pasan en vano. Ni modo. Sin embargo, la gocé miles y en especial porque me volví a encontrar con el chinito que en la primera decía que la vida empieza a los 70.
¡¿A los 70?! Puf… es decir, la mayoría no hemos nacido todavía, mientras que éste honorable personaje corre feliz con unos chilindrines en sus manos y un viejo aparato en la cintura que le acompaña reproduciendo a buen volumen su tonada oriental favorita. Así como el Indio o el Liguista en nuestras carreras turneras en Costa Rica, éste chinito simpático de pocas palabras y de paso a buen ritmo en la media maratón, me recordó mi primer experiencia con número en la camiseta por éstos rumbos.
En Brooklyn me llevé una cámara y tomé algunas fotos. El domingo pasado llevé una de video y resumí las imágenes en éste cortito casero, hecho con un par de clicks en el Magic Movie Maker de Flipshare: