Los números en África son espeluznantes, pero más aún lo es su repercusión en vidas humanas, en su muerte y la miserable “calidad de vida” que sufren todos los días. Mientras que en Costa Rica
Carlos González fue mi compañero, amigo, hermano en México en los cinco años que vivimos allá. Carlos falleció en un accidente en su Duccatti a alta velocidad en la autopista a Acapulco, y por esto,