3.374 PAGE VIEWS AYER Y 0 COMENTARIOS

A este blog no hay quien lo entienda. La estadística que me entrega el sistema es muy limitada, y por esto, realmente no se quién lo visita. Supongo que somos un poco de publicistas amigos, o de repente, muchos que no nos conocemos. Lo cierto es que si en un sólo día se dan más de 3.000 hits, debe ser que llega un poco de gente más de la que suponemos. En el mes pasado, superaron 70.000 los hits acumulados, y aunque no tengo idea cuántos lectores significa esto, al menos revela que llega alguien más que yo al teclear por acá.
No obstante, es impresionante la baja participación en comentarios, si la comparo con los blogs que visito. En otros países o culturas, la participación es masiva y se genera una amplia discusión, se abren foros en temas de interés y se agregan opiniones. Esto me hace pensar que, o todo lo que acá se escribe provoca un bostezo en lugar de un comentario, o simplemente, los ticos preferimos no participar, no decir las cosas por su nombre, quedarnos en el anonimato o hasta tirar la piedra y esconder la mano.
Mi apuesta temeraria es la segunda. En general, creo que en nuestro país el NO, no existe, el TAL VEZ es realmente no, y el SI es un tal vez. Le damos vueltas a las cosas, no hablamos directamente, en general, no somos frenteros ni confrontativos. De hecho, estoy claro de las mil y una críticas de las que ser objeto al compartir mis pensamientos, mis ideas, mis sentimientos, mis tecleos sueltos y a la libre. Resalto que no ignoro lo que implica este nivel de exposición, y por esto, no quiero llamar a engaño a ninguno de mis detractores, dado que ésta vulnerable posición verdaderamente que no me preocupa. Todo lo contrario, celebro la oportunidad que me ofrece la cercanía de mis palabras con vos, y la oportunidad que tengo a menudo de provocar una reacción positiva, de inspirar con un concepto, de compartir ideas transformadoras, de contarte y abrir para conectarnos.
De alguna manera, escribir en el vacío de una pantalla y ver cómo crecen las ideas una tecla a la vez con cada palabra, me provoca una especie de intriga y emoción, de inquietud y placer. También es cierto que, como todo en la vida, cada día se me ha hecho más fácil, porque si querés dominar cualquier cosa en la vida, la práctica siempre será una buena compañía. Por esto, lejos de ser mejor en cada artículo, simplemente lo hago con más facilidad para conectar las yemas de mis dedos con el corazón, para redactar lo que viene sin pensarlo en exceso, para no permitir que la razón domine y así evitar más información. Total, esto es simplemente un blog, no es un libro, ni una tesis, ni un editorial ni nada que se le parezca.
Dicho esto, no quiero dejar de decir lo mucho que celebro las pocas pero muy apreciadas e importantes participaciones a lo largo de más de un año en este experimento en la red. A todos los participantes, comentaristas destacados de A Fuego Lento, mi sincera felicitación por el aporte o los aportes realizados. Los comentarios enriquecen, engrandecen y encienden, agregan, dinamizan y detonan. A todos quienes visitan este rincón en la interminable red de sitios en Internet, mi reiterada invitación a participar.
Mientras tanto, ayer recibimos 3.374 hits y ningún comentario. Tal vez mañana sea un poquito diferente.
NOTA: en la columna de la izquierda, abajo de las fotografías, siempre podrás encontrar destacados los últimos comentarios aportados. Con un click te vas a ellos y ahí, es fácil aportar el tuyo.