Todos los textos que he publicado recientemente en A Fuego Lento han nacido del deseo de compartir e inspirar. Y lo subrayo porque pienso en ello y sé que no siempre ha sido así. En el pasado, cuando me decía publicista y empresario, en mis escritos a menudo subyacía un afán por construir mi marca […]
Legendario Hernán Ortega, primer creativo publicitario graduado de una universidad, reconocido, grande, exitoso y con una gran trayectoria hasta ese momento, Hernán aceptó unirse a Consumer, lo que me honró, me conmovió y me dio una gran confianza, fuerza e impulso. Con [...]
Los inicios de Consumer se marcaron por gente que, como Eduardo, vinieron he hicieron una gran diferencia. De ellos aprendimos mucho, y por esto, nos encantaría aprender ahora la perspectiva que tenés de Tribu, habiéndola conocido en sus inicios, habiéndola re-conocida recientemente, [...]
Alita llegó a Consumer un día para una emergencia. Habíamos tirado varias campañas, estábamos atrasados en la presentación de la campaña a Banex por unas dos semanas, y ya no teníamos tiempo. El canasto de basura estaba lleno de ideas que no [...]
Mi compadre y mega bati ultra super recontra talentoso Pana, hizo para Consumer los primeros diseños. De hecho, como free lance, fueron para la línea de antitusivos de Cofala. Ex-compañero de McCann, al empezar Consumer alquilamos juntos un altillo cerca de Canal [...]
Cuando Kevin estuvo por Tribu en Julio pasado, si no me equivoco, se rompió un paradigma de muchos años, porque se supone que nuestros países no son lo suficientemente grandes, que nuestras agencias solo son afiliadas, y que las agendas de los [...]
Los 10 años más calientes de la historia registrada, han sucedido en los últiimos 15 años. Se estima que los niveles de CO2 son los más altos en al menos 650.000 años. De El País, el siguiente resumen de la declaración en [...]
El Ojo de Iberoamérica te da una opción de estar virtualmente presente y conectado con lo que estará sucediendo en Buenos Aires de lunes a miércoles de esta semana, a través del
Posiblemente una de las más aberrantes palabras del idioma es el pero. En realidad para nada sirve y mucho estorba en un mundo que necesita sumar en vez de restar. Por esto, la propuesta es simple: cambiemos
